He dado un paso involuntario probablemente erroneo y en falso, no lo se, solo el destino sabra que habra para mañana, pero mi instinto me dice que algo bueno hallare en aquellos tastabilleos,o que alguna buena frase atendera cuando el titubeo inseguro se apodere de mi. he aprendido a no esperar, he aprendido que mientras menos ancías, la vida te llena de sorpresas gratas e inimaginables que jamas pensaste que llegarian a ti. es por eso que la navidad ha perdido esa sensacion hogareña y gratificante. esperamos las doce de la noche para abrir el regalo que ordenamos (digo ordenamos por que lo exigimos como si fuera un derecho) pero daria lo mismo abrirlo ahora o en diez dias mas ,si sabes lo que contiene la caja adornada ,y asi la vida va perdiendo poco a poco,año a año su misterio... el problema esque cuando abres la parafernalica envoltura y descubres que no era lo que pediste, el mundo se derrumba, porque ya nos habiamos acostumbrado a la idea de vivir con aquel obsequio, a la idea de que todo lo que anhelamos llegara si o si a nuestras almas.
pero yo he descubierto que no es asi, y afirmo que siempre es mejor respirar sin preocuparse si al inhalar otra vez ya me he gastado el aire.
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